Debo reconocer que mi primera incursión en la bibliografía de
Amanda Hocking (véase Tierra de Magia, tomo 1) fue un desastre. No obstante,
esta novela juvenil, que fusiona la vida de un pueblo costero con el terrible
mito de las sirenas más monstruosas, ha rescatado a esta autora de la lista
negra.
Gemma adora nadar. Especialmente de noche en la bahía, cuando
el mar y el firmamento se funden en una sola dimensión. Sin embargo, la paz del
pueblo donde vive se ha roto. Varias personas han desaparecido sin dejar rastro.
Nadie sabe por qué. Y hay algo extraño en las turistas recién llegadas.
Caminan como si fueran estrellas de cine y su belleza tiene arrebatados a los
lugareños. ¿Qué buscan? ¿Por qué unas jóvenes de vacaciones resultan tan
siniestras?
Inexorablemente, las desconocidas van tejiendo una red
alrededor de Gemma que la arrojará a un lugar donde conviven sus sueños y sus
pesadillas.
En la última obra de Amanda Hocking publicada en España por Destino, conocemos a dos hermanas, Gemma y Harper, cada una con sus
edades y objetivos en la vida muy diferentes. Su rutina, sus sueños, sus
personalidades, todo se desarrolla con normalidad y realismo. Poco a poco, la
autora va plantando dos semillas. Por un lado, los posibles intereses
románticos. Por el otro, una insidiosa sensación de que va a suceder algo
terrible. Y no puedes hacer nada por evitarlo.
La situación familiar de las hermanas es bastante dura y se
refleja con detalle. Al igual que los caracteres de ellas, muchas veces en
conflicto. Amanda H. esgrime una prosa sencilla al máximo, pero se detiene
en perfilar a los personajes de modo que todos tienen su matiz distintivo. En
especial, sus dos protagonistas estrella, las hermanas. Me ha gustado Mary, una
amiga sin pelos en la lengua, y también tengo cierta debilidad por Daniel, uno
de los romances en ciernes con aires de seductor y su gancho de buen humor.
El viaje hasta la bahía fue más
rápido de lo habitual. Incluso pedalear parecía más fácil. Gemma se sentía
flotando en una nube. Un simple beso de él había vuelto todo su mundo más
liviano.
Cuando la voracidad despierta en Gemma, es un instante brutal.
Me ha gustado mucho, tanto lo intenso como los detalles, al igual que los
síntomas de su transformación. Porque las sirenas son criaturas fascinantes,
pero ocultan un lado tan misterioso como la luna. Y Amanda H. no se corta un
pelín para mostrarnos hasta qué punto guardan secretos de índole mitológica y
aserrado peligro.
Harper, la hermana mayor, es tan protagonista como Gemma, el
centro de la trama sirenil. Entre las dos se genera un gran flujo de
electricidad humana.
Las escenas en general se suceden con naturalidad, hilando
los diálogos sin artificio. La autora crea unos personajes afines y
reconocibles. Eso sí, la temeridad de Gemma es de nota. Gente desaparece y todo
el mundo salvo el espíritu santo le dice que no vaya a cierto sitio, pero ella
se empecina y va. Claro, así acaba como acaba. Quemada. O deberíamos decir,
mojada hasta el tuétano. Y escamada.
En cuanto a la panda de chicas malvadas, realmente son como
una banda de animadoras de instituto. Frívolas, gamberras, monísimas. Tratan al
mundo como si fuera su plato de las sobras personal y arrastran una historia
antiquísima que arredraría a un tiburón.
En esta primera parte de la saga Canción de Mar, se mezclan
el amor, la familia, las decisiones arriesgadas sobre quién es uno mismo y a
qué se guarda lealtad, pero también la pasión desbordada, un terror muy antiguo
y los miedos diarios de la vida.
SIRENAS
AMANDA HOCKING
298 págs.
Paranormal
2012
Título original:
WAKE
Relación
calidad/precio:
15 pellizcos
Vale la pena
|
Sirenas es el primer libro de una tetralogía compuesta por Wake, Lullaby, Tidal y Elegy. Además, existe una precuela titulada Forgotten Lyrics.
sin portada decidida
precuela
Con Sirenas, me he reconciliado con esta archifamosa autora
juvenil. No sé si algún día leeré sus otras sagas, pero sí estoy segura de que
quiero saber en qué se ha convertido Gemma y a dónde le conducirán sus escamas
iridiscentes.
buceando entre corales.