Romance alborotador: RUCKUS

Saludos :o) ¿Qué tal empezamos marzo? Yo estoy agotada, aunque no de leer :-D Por eso sigo trayendo a este santuario mis últimas lecturas como, por ejemplo, este discreto galán.

¿Qué tal suena un idilio para toda la vida con este dechado de vicios y beldad  masculina?

Pues a leer...

RUCKUS

de L. J. SHEN

GANCHO. Portada viril que no se la salta ni un canguro y la firma de una autora que siempre mete un huevo Kinder de dramón que te hace replantearte toda la historia. 

ESTILO. Desenfadado, provocativo, brutal y hostil, con doble punto de vista que perfila los personajes hasta la médula, canallesco y macarra aunque juegue entre ricachones.

TRAMA. La hermana menor enferma renuncia al hombre que le hace perder el sentido por amor a su hermana mayor acosada. Este segundo libro en la saga de Pecadores de Saint, se centra en una pareja inusual entre uno de los casanovas de la banda de cuatro en el instituto de All Saints y una chica enferma de fibrosis quística que no apuesta por su propio futuro. 

Se cuenta con mucho descaro y osadía, sin minimizar detalles de los devaneos de todo quisque y subrayando en fosforito los fallos, vicios y crueldades. Entremezcla los sucesos de juventud con la realidad once años después, cuando Dean Cole aprovecha su última oportunidad para reclamar a la mujer que nunca pudo tener. Mientras ella se resiste por los vínculos del pasado que podrían hacer daño a su familia, él la ronda como un depredador con armas como una mentalidad muy sucia, una libido disparada y promesas de fidelidad eterna.

Su historia está entretejida con la continuidad de la pareja anterior, Emilia y Vicious, protagonistas de la primera novela que aquí también evolucionan en su relación. El grupo al completo de Buenorros tiene su presencia y son tan deslenguados, brutos y dominantes como Dean. 

PERSONAJES. El pendenciero de turno, encantador, gamberrazo y adicto a todo lo que se cuece en un laboratorio bajo el sol, Dean es uno de esos emprendedores con toneladas de labia y muescas en el cabecero de la cama. Sin embargo, también es el único que no se arredra ante el muro impenetrable que ha construido Rosie a su alrededor, quien lucha por su independencia en la vida con uñas y dientes pero tampoco cree que vale la pena hacer planes a largo plazo. No vivirá para disfrutarlos. A duras penas 

ROMANCE. Borrascoso y salvaje. Primero pelean y se enzarzan en diálogos escabrosos y subidos de tono, pero poco a poco el semental de Dean acaba socavando la resistencia de la chiquilla porque está acorralada por muchas presiones. Paradójicamente, este mujeriego adicto es justo la medicina existencial y, por qué no decirlo, lujuriosa que la chica necesita para levantar cabeza, ser feliz y empezar a tener esperanza mientras haya vida. 

Su relación es muy entretenida de leer. Para mí que sobran algunos párrafos referidos a las drogas, el alcohol y lo bastardos que son todos los chicos del grupo, pero desde luego nos hacemos una buena idea de quiénes son. Por eso llega el momento en que abren sus corazones y ahí descubrimos el dramón que había estado escondiendo el querido Dean y no era para nada lo que nos esperábamos. ¡Toma ya! Romance a raudales, apoyo incondicional, fuerza vital. Un derroche.

DESENLACE. Toda una tormenta de agrios secretos y crueles consecuencias. Lo que tiene esta autora es que una parte cansa un poco por lo autodestructivos y tóxicos que pueden llegar a ser los personajes, pero luego despega con una auténtica avalancha de dramón lacrimógeno que te deja tirada y fascinada a partes iguales. Dean y Rosie entran en una espiral de agonía y amor trágico que te hace temer por lo negro que se pone todo. Aunque hubiera preferido una transición más coherente entre los dos capítulos finales, desde luego que se puede considerar un colofón a lo grande.

Me ha encantado el comienzo de cada capítulo en el que Rosie enumera distintas razones para sentirse viva. ¡Un puntazo!

Citas favoritas:

Mis pétalos iban cayendo uno a uno.

En ese punto erógeno entre la libido y el alma.

Qué pena que la química fuera una cuerda inexplicable que atraía a dos personas. Porque fue así cómo me sentí en ese momento. Atada.

La ficción es mágica. La realidad es dolorosa.

Nos restregábamos como si intentáramos hacer fuego.

El amor y la muerte están conectados por una cuerda invisible. Tira demasiado fuerte y te habrás ido.

Datos de RUCKUS

Web de L. J. Shen

Editorial Chic

romance contemporáneo

Tapa flexible con solapas

378 páginas; 16,90€

¿Qué clase de portadas preferís para los romances? ¿Reveladoras o sugerentes?

Babel se pasa las horas mirando la cara (¡la cara!) de este chavalote.