Mostrando entradas con la etiqueta firmas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta firmas. Mostrar todas las entradas

miércoles, 5 de junio de 2013

Cosas que pasan en la feria del libro


Juro que lo que voy a contar es la verdad y nada más que la verdad. El sábado 1 de junio se celebró la Blogger Lit Con 2013 en el primer fin de semana de la feria del libro. Una conjunción cósmica que iba a tener consecuencias impredecibles y maravillosas.

botín de marcapáginas, tarjetas y catálogos

En la reunión de las 10 de la mañana, el tumulto formado por los asistentes sólo era superado por los chillidos de emoción de amigos que se reencontraban. No pude ver a todos los que conocí en la quedada del año anterior, pero sí fui afortunadamente abordada por Vero de Dragonfly, Esme de Fly like a butterfly y Caminante de Bibliofilosis Letrae. Además, el terremoto de Bella me plantó un abrazo y un beso dignos de una peli clásica.

En compañía de mi inseparable Xulieta, de Nevera de libros, fuimos desde la foto masiva en la que no se me ve (ventajas de ser medio hobbit) dando tumbos por toda la feria. No acudí a muchos eventos con autores y reuniones en césped redondo, porque arrastré a la pobre Xulieta a hacer cola para la firma de Glenn Cooper, el autor de mirada penetrante de la trilogía de La biblioteca de los muertos. Me dio la mano, intercambiamos algunos comentarios y me hice una foto con él. Suspiro toda. 

De lado a lado de la feria todo el día, al sol y haciendo las veces de mula con mochila, bolsas y más bolsas, creo que tengo más agujetas que cuando corría dando vueltas en el colegio. Tengo un batiburrillo mental de todo lo que pasó. Nos cruzábamos de vez en cuando con otros blogueros y compartíamos algunos chismes y un buen rato. Saggara de La estantería de los libros, Alicia y su novio de no estoy segura de qué blog pero creo que es Un libro bajo la almohada ¿? :S

Me lo pasé de miedo porque no hacíamos más que reírnos, hablar de libros y, sobre todo, devorar las casetas con todas sus novedades. Incluso nos entrevistaron ante una cámara y, en recompensa, pudimos elegir 3 libros a dedo para llevarnos a casita. ¡Alucinante! Eso sí, este año he reparado en que hay una alarmante escasez de marcapáginas a disposición del lector. Muy mal. Aún así, he tratado de recolectar para mi colección y para el banco de swag del que repartir posteriormente a amigos y premiados. La hora de la comida sirvió para que todo el mundo se volviera loco de ilusión concursando en los juegos de sabiduría literaria. 

Ya por la tarde, me pasé casi todo el tiempo haciendo cola para la firma de Javier Sierra, con el que me fotografié contenta por la firma de mi precioso ejemplar de El maestro del Prado. Buenas firmas, puesto que también pude conocer a Natalia SanMartín quien fue deliciosamente amable al firmar El despertar de la señorita Prim. Se hizo tardísimo pero antes tuvimos tiempo de conspirar con Lily de El desván de los sueños y seguir arrasando la feria a la que dejamos temblando casi sin material.

interesantísimo Glenn

super amable Javier

encantadora Natalia

Y los libros acumulados gracias a regalos, intercambios y compras...


¿Cómo? ¿Que si vamos a volver el sábado próximo?
Os dejo que adivinéis ;o)

Babel con agujetas eternas.

lunes, 11 de junio de 2012

Día 3 en la Feria del Libro 2012




Me va a durar el mono un mes, lo estoy viendo venir. Cuando se tienen experiencias tan intensas como las vividas este año en la feria del libro... la vida ya no tiene el mismo sabor. Aún así, habrá que buscarle un aderezo, ¿no? ;o)

En esta ocasión no madrugamos, aunque el resto del día fue arduo y salvaje. Nos atiborramos a recoger marcapáginas, primeros capítulos, catálogos... y a comprar "algunas" de las bellezas que más nos atraían. No creáis, se nos han quedado bastantes en el tintero O_o.


Nos aproximamos a la caseta donde el amabilísimo y siempre sonriente Blue Jeans firmaba su última obra, ¡Buenos días, Princesa! El hombre posaba para fotos de fans y fotos que él mismo guarda, además, ofrecía un cuaderno de firmas para que los lectores dejaran un recuerdo de su pasión lectora. ¿A que es un encanto?


Luego, Judías Verdes y yo nos topamos con la (maravillosamente efusiva) Xulieta y a partir de ahí, todo fue una locura. 

Después del picnic con bocadillo de tortilla, carne macerada en hierbas, tomate fresquito y cerezas de postre, nos reunimos con una panda estupenda de blogueras y nos marchamos a la charla con Rachel Caine, autora de la exitosa saga de Los vampiros de Morganville.


Comentó muchísimas cosas sobre sus duros inicios, los muchos años venciendo la frustración para seguir escribiendo a pesar de los rechazos editoriales, sus ganas de ver convertida su saga en un proyecto televisivo... Esta mujer derrocha buen humor y ganas de hablar con sus seguidores. Le encantaron las preguntas, en todo momento mantuvo la sonrisa y apreció, junto a su (de aspecto rockero) marido, el privilegio que supone viajar por el mundo para conocer a los fans. 


Con una camaradería de años y buen humor complementario, "El Gato", marido de Rachel Caine, nos deleitó con una firma gráfica en el libro, ya que él es ilustrador de fantasía.



Estoy contenta y agradecida por haber podido participar de este evento, a María Cazadora de Sombras y Libros, por organizarlo, y a la editorial Versátil por su invitación, además de los marcapáginas y chapas de regalo.


Tras una cola kilométrica y mucha intervención nevero-divina, Judías Verdes pudo lograr su firma ansiada de la autora de novela negra Camilla Läckberg. Una mujer elegante y fina que mantenía la sonrisa plácida tras horas de fans en masa. Chapeau!

Tras un paseo, terminamos hablando sin parar entre hamburguesas y patatas. Ay, qué cansancio, pero qué buen cansancio ;o)

BOTÍN LIBRESCO

No sé qué tal estará La esfera, 
pero estoy muy ilusionada con el regalo de Xulieta, Abandonada
love, love


todo vampiros, porque yo lo valgo XD


lo que me gusta a mí un buen par de historias



Y se acabó lo bueno :o(

Esta semana me espera mucho sufrimiento en el trabajo... Deseadme una larga vida, o pereceré.



que celebra lo que tiene y desea olvidar lo que no tiene.