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domingo, 20 de mayo de 2012

Un sábado con autores



Buenos días, mis queridos arrebatadores. ¿Os está cundiendo el fin de semana? Os contaré que, ayer, me pasé por el forum de Fnac ya que se está llevando a cabo el segundo encuentro nacional de Anika entre Libros. Tenía mucha curiosidad por las actividades que organiza esta omnipresente mujer. Así que JudíasVerdesconWindows y yo nos pasamos la tarde entre charlas de autores, fotografías con flash que parecían perdigones cruzando la sala de un lado a otro, debates sobre el (tétrico y precario) futuro de la sociedad moderna, presentaciones de libros, firmas y una tarta de tiramisú que ya estaba deseando probar. Buenísima, por cierto ;o)


Llegamos a tiempo de escuchar a Juanjo de Goya, autor de la saga Bellenuit, presentar su obra y los vídeos confeccionados por él mismo. A su lado, un ingeniero que un buen día encajó varias ideas y logró una novela de corte tecno-ficción, Víctor M. Valenzuela, escritor de Los últimos libres.


La siguiente presentación corría a cargo del escritor Javier Pellicer, cuya obra El espíritu del lince, ediciones Pàmies, me tienta cada vez más.

Gracias a las preguntas clave del escritor Antonio Mateo Sagasta, descubrimos muchos detalles del libro. No sólo mezcla historia con fantasía, algo que considero un acierto fascinante para aquellos que nos gustan ambos géneros, sino que las batallas comparten terreno con un romance pasional. Una cosa que me llamó la atención es que Sagasta comentó que el protagonista de El espíritu del lince podía ser un poco pacato, ya que denuesta la prostitución y la esclavitud, además de comportarse como un adolescente con su enamorada. Y yo digo, por favor, dame más pacatos así XD. Cosas de género, supongo.


Esta es la bellísima portada. Se sabe que los íberos adoraban a los antepasados y a los animales. Principalmente, rendían culto al toro y al lobo, pero también se les conoce reverencia hacia el lince, animal por otro lado maravilloso. Tengo ganas de conocer un poco más la mente tras el libro. Quizás en la feria del libro tenga la oportunidad de intercambiar una palabrilla con el autor. Firmará el sábado 26 de mayo de 11,45 a 13,45 horas en la caseta 210 de Pàmies y de 18 a 20 horas en la caseta 29 de UDL.

Aquí podéis medio verle, tras la charla, cuando se dedicó a firmar ejemplares a una larga cola de emocionados lectores.


Después, escuché ávidamente las charlas de una escritora de novela negra, Empar Fernández, con su libro muy humano y cruento, Sin causa aparente, y de un par de autores unidos por el terror, apocalíptico uno y psicológico otro: Emilio Bueso, ingeniero reconvertido en escritor con una oratoria al estilo rap que suelta profecías como una metralleta, acompañado por Ismael Martínez, más calmado, más reflexivo, más cautivado por las ramificaciones de la psique humana. Los libros que presentaron fueron Cenital y El escondite de Grisha.



No os imagináis las ganas que tenía de conocer a la preciosa y romántica Victoria Álvarez. Es una escritora que lee en inglés, escribe sobre fantasmas en el cementerio de Highgate, tiene el mismo gusto en hombres que yo (!) y semeja una aparición de otra época. Su obra, Hojas de dedalera, incluye interesantísimos elementos como Jack the Ripper, misterios, amor prohibido y una planta que representa una frontera entre la vida y la muerte.


Aquí podéis verla acompañada por Anika, en un momento de gran diversión, y por el escritor Joe Álamo, autor de Tom Z Stone. Esta obra de novela negra con punto zombie me sorprendió maravillosamente. Tengo ganas de conocer a esa secretaria que se rebeló contra las restricciones de su personaje original. Además, ha logrado una historia sumamente original donde pululan reanimados y los Beatles!

Por cierto, Victoria comentó que, por diversas razones editoriales, tuvo que eliminar gran contenido de la novela. Qué vuelco al corazón me dio. Sabemos que cortó parte del personaje de Ada, pero qué otros secretos andarán guardados en un cajón...


Así que sólo me queda decir que me lo pasé bien, quisiera repetir el próximo año porque me encantan estos encuentros en los que la palabra y el buen humor son los protagonistas indiscutibles y, además, se sortean libros entre los asistentes. ¿No es un placer literario digno de un sibarita?

Gracias por estar ahí, mis arrebatadores. Mañana volvemos con sorpresas :o)



cronista.