Estos días de calor perezoso y merecidas horas de descanso,
me estoy zambullendo en los libros a placer. Tras leer la simpatiquísima novela
La felicidad es un té contigo, de Mamen Sánchez, no tenía más remedio que caer
rendida ante otro título escrito para mí: EL CLUB DEL TÉ, de Vanessa Greene.
Esta historia apelará a los amantes del té, como yo, que
somos muchos y orgullosos de serlo sin menospreciar al aromático café, pero no
sólo a ellos ya que esta bebida sirve de (reconfortante) excusa para vincular a
tres mujeres. De la manera más fortuita posible, Jenny, Maggie y Alison cruzan
sus caminos un buen día en un mercadillo. Su amor por las tazas de té antiguas
las conduce a un puesto donde hallan un precioso juego de tazas vintage casi al mismo tiempo. El dueño
no se quiere meter en problemas, por lo que ellas deben decidir quién puja más.
Nuestras protagonistas no son chifladas de las rebajas que arremeten con patada
y puño por la prenda codiciada, de modo que se paran a conocer sus respectivos
motivos para desear tan precioso objeto. Quizás sea cosa de novela, quizás son
mujeres agradables que han domado su primer impulso cavernario de golpear y
echar a correr con el botín. La cuestión es que pactan un acuerdo beneficioso
para todas: compartir el juego de té.
A lo largo de la novela, he ido conociendo a estas tres
mujeres de edades y vidas dispares. Enseguida me he encariñado con ellas pues
son naturales, sus vivencias son plenamente reconocibles aunque no sean las
mías, y el estilo narrativo es muy cercano. La trama es sencilla, con mucho
sabor británico. Es muy dulce, encantadora como las tazas de té que han unido
en una paulatina y bonita amistad a estas mujeres con problemas cotidianos y
unas cuantas decisiones emocionales muy duras que tomar. Es también realista,
pues cuando la porcelana se rompe, tiene aristas que duelen. En la vida de cada
una de estas tres mujeres, las aristas aparecen en lugares distintos, pero
siempre están ahí. En el pasado, en forma de personas que significan demasiado
en el presente. O en las crudezas de la vida.
La joven Jenny está a punto de casarse con un hombre que la
quiere. Sueña con celebrar una boda estilo vintage, con tazas de té por
doquier. Sin embargo, un suceso en el pasado lastra su felicidad hasta tal
punto que pone en duda su boda. Y es verdad que a veces ponemos en jaque
nuestra felicidad por esos pesos que arrastramos desde muy lejos. Por otro
lado, Maggie está obsesivamente entregada a su tienda con la que provee de
flores maravillosas a toda clase de eventos y personas. Ahora, un proyecto de
gran envergadura podría promocionarla como nunca antes. Necesita tazas de té a
gran escala. Y sobre todo que el paisajista con quien tiene que compartir la
organización no se meta en su camino. Guapo o no, no confía en el amor desde
que su marido la dejó por su propia profesión. Finalmente, Alison tiene un
pequeño negocio on line donde vende objetos que ella misma confecciona,
incluidas tazas de té reconvertidas en velas. Está intentando sacar a su
familia adelante desde que su marido perdió el trabajo. Nada es como antes, el
amor parece resentirse tras muchos años de matrimonio y las hijas adolescentes
son algo díscolas. ¿Debería seguir adelante a pesar de todo?
Le teníamos cariño a muchas cosas, pero el tiempo pasa,
¿verdad? Y dejas de darle tanta importancia a todo. pág. 201
Me ha encantado la forma en que se desarrolla la amistad
entre ellas a medida que se reúnen los sábados para ir de caza por los
mercadillos. Nunca hay suficientes tazas de té para conseguir la colección
perfecta. Alternando capítulos entre las tres, vemos la evolución de sus cuitas
del corazón y las consecuencias de sus decisiones. A pesar de la sencillez
aparente de las historias, hay cabida para el romance, los malentendidos, la
esperanza, la ilusión por los proyectos laborales y personales, y el
descubrimiento de una misma.
EL CLUB DEL TÉ
Vanessa Greene
Tapa flexible con
solapas
366 págs.
Contemporánea /
Vintage / Té
2013
Título original:
The Vintage Teacup
Club
Relación
calidad/precio:
20 pellizcos
No es nada barato,
pero la lectura es
muy amena
|
Es una novela deliciosa, encantadora y tierna. Al final, te
deja sonriente y complacida, igual que si hubieras dado el último sorbo a un
buen té. Me han dado ganas a mí de empezar a coleccionar tacitas vintage ;o)
Aunque ahora que lo pienso, tengo un buen montón de teteras.
Babel en una bañera de té.