GUILLOTINADA

Todos sabemos cómo acabó María Antonieta. A veces la corona, más que un privilegio, es una maldición.

En la corta novela VERSALLES, de Kathryn Davis, he hallado una melancolía propia del que sabe su destino. La autora juega con el conocimiento popular acerca de esta mítica figura de la historia, por lo que no nos engaña con misterios. Simplemente sabemos el final. Ahora, lo importante aquí es desvelar el alma de la protagonista.

"Y tal vez eso es lo que significa estar contenta: tener el corazón recluido a salvo, como un mundo encerrado en sí mismo."

La novela está escrita con un estilo inusual, casi disparatado a veces. Sin embargo, al igual que la época convulsa y revolucionaria de la Francia de Luis XVI, transforma la perspectiva y se convierte en una lectura hipnótica.

"La tierra bajo nuestros pies era la misma, el cielo sobre nuestras cabezas era el mismo, pero podríamos haber estado en otro mundo."

¿Cuántas mentiras adornan la bella cabeza de María Antonieta? ¿Cuántos de sus crímenes contra el pueblo son ciertos? A pesar de todo, a pesar de la revolución y de la guillotina y de los pasteles y de los políticos, una mujer ha sobrevivido, si no en carne, al menos y eso es mucho, en la memoria del mundo.

"Me pidió que le besara la mano.

¿Y lo hiciste?

Por supuesto que besé su mano. Ella es muy grande, muy noble y muy desgraciada, pero voy a salvarla."

 Esta novela es un tributo especial y delicioso a una época y a una mujer que la marcó.

  Me ha endemoniado en grado … 

Babel palaciega.